Diástasis abdominal y segundo embarazo

He decidido llamar este post «Diástasis abdominal y segundo embarazo» porque me parecía más correcto (y mas corto) que «Como estar hasta el mismísimo coño de que te digan que se te nota el embarazo desde la semana 6 y no liarte a hostias con todo el mundo«.

Bueno… tras este breve y mal sonante resumen del post. Y tras pedir disculpas por las susceptibilidades que pueda haber herido por semejante subtítulo, os diré que sí… tengo diástasis abdominal. En entradas anteriores («Diástasis, esa gran desconocida«, «Lo que nadie me contó sobre… El postparto«, «El post de la semana: Fisioterapeuta del higo» y «Gimnasia abdominal hipopresiva«) ya os hablé de qué es la diástasis abdominal, lo que he sufrido con ella y cómo he trabajado en la rehabilitación. Ahora, quisiera contaros cómo estoy llevando este tema con mi segundo embarazo.

Hace meses que estaba ya «olvidado». A pesar de que todavía tenía una apertura de unos dos dedos y aunque visualmente todavía se notaba un poco, era algo con lo que había logrado convivir y no me molestaba. Pero con este segundo embarazo, los miedos a la diástasis (y a la hernia umbilicar que también me acompaña) han vuelto a aflorar. Y es que… el saber a lo que te me voy a tener que volver a enfrentar tras el parto hace que se me pongan los pelos como escarpias…

Pero ese no es el tema, ya tendré tiempo de preocuparme por mi rehabilitación. Lo que realmente me está tocando los coj… ovarios es la insistencia de absolutamente todo el mundo (excepto mi pareja y porque sabe a lo que se enfrenta) por decirme: «Uyyyy ya se te nota la barriguilla ¿de cuanto estás?» seguido de «ya bueno, es que con el segundo embarazo se nota antes no?«.

Que si señores, si… desde el segundo embarazo la barriga es evidente antes que si fuera tu primer embarazo. Pero en serio ¿es necesario que desde la 6ª semana ya me lo estén diciendo? y el remate es cuando además me comentan

–Pues si que tienes la barriga alta…

Y da igual que les digas –Mira, tengo diástasis de los rectos abdominales y lo que piensas que es la barriga de embarazada en realidad es el estómago que protruye hacia afuera debido al empuje del útero que está creciendo.

Es inútil… porque se te quedan hipnotizados mirando la barriga sin haber escuchado una sola palabra de lo que acabas de decir y te contestan –Que sí mujer, que ya se te nota el embarazo. Pero es normal, con el segundo la tripa crece antes.

Toma ya!! ¿qué coños vas a saber tú de diástasis ni mierdas similares? Seguro que eso es algo que te has inventado para justificar los kilos que no has perdido tras el parto… Ellos si que saben… y tú no tienes ni idea. Esa es la conclusión a la que he llegado tras pasarme semanas intentando justificame cuando les respondía que todavía no se me notaba y que por favor hicieran el favor de mirarme a los ojos mientras les hablaba.

Ya he dado la batalla por perdida, no pienso explicarme más ¿para qué, si por un oído les entra y por el otro les sale?

Así que ahí va mi consejo: Nunca, jamás de los jamases le preguntéis a una mujer si está embarazada porque tenga una «barriga sospechosa». Y nunca, jamás de los jamases le digais a una mujer que os ha confirmado que está embarazada que se le nota o se le deja de notar el embarazo. Y aquí os dejo un extra: Si algún día os encontráis conmigo por la calle, por favor,  miradme a los ojos y simplemente decidme lo bien que me sienta el embarazo 🙂

Os quiero preciosuras, nos leeremos en el siguiente post.

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